Un estudio señala que los niños que andan descalzos son más inteligentes y felices

27 abril, 2018

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Un estudio señala que la costumbre de calzar precozmente a los bebés y los niños puede afectar negativamente a su desarrollo y que, por contra, los niños descalzos desarrollan mejor su inteligencia.

El estudio se titula “Podología preventiva: niños descalzos igual a niños más inteligentes“, fue elaborado por Isabel Gentil García, Profesora de la Escuela Universitaria de Enfermería, Fisioterapia y Podología de la Universidad Complutense de Madrid.

Por qué son tan importantes los pies del bebé

Desde el punto de vista del desarrollo neurológio y de la sensibilidad táctil, los pies del recién nacido tiene una sensibilidad mucho más fina que la de la mano hasta los ocho o nueve meses.

Por ello en los primeros meses los pies tienen una función esencial: informar del mundo exterior al bebé, que toca con ellos todo lo que tiene a su alcance, los manipula con sus manos y los lleva a la boca donde las terminaciones nerviosas sensitivas son mayores. A partir de esta edad el pie de forma gradual pierde este tipo de sensibilidad.

El hecho de calzar continuamente a los bebés que no caminan les priva de información táctil y la percepción de la posición y movimiento de los pies en relación con el espacio, que juegan un papel importante en el sistema nervioso central. Por ello para la maduración de las habilidades motoras son necesarios el desarrollo de la coordinación visual manual y la adquisición de estas informaciones táctiles y perceptivas.

El estudio además se basa en las etapas de Piaget de desarrollo de la inteligencia, centrándose en la primera, en la etapa sensomotriz (desde el nacimiento a los dos años), cuando son importantes la manipulación, el movimiento y aprender a organizar de forma hábil la información sensorial. Se adquiere la primera noción del yo, del espacio, del tiempo y la idea de causalidad.

La inteligencia se desarrolla mediante:

-La maduración del sistema nervioso, esto es la capacidad de diferenciar y discriminar cada vez un mayor número de estímulos y tiene que ver con la diferenciación de las células nerviosas.

-La experiencia de interacción con el mundo físico, esto es la manipulación, el manejo de los objetos. Significa conocer el funcionamiento de los objetos a través de manipular con ellos. El desarrollo de la inteligencia no sería posible sin esa manipulación, pues la maduración del sistema nervioso no es independiente de la experiencia. Junto a las manos y la boca, los pies también tienen un papel fundamental.

-La necesidad de aprender. La mente humana tiende al equilibrio cognitivo. Cada vez que hay un estímulo exterior que no comprendemos tendemos a comprender. El sistema cognitivo tiende a buscar nueva información para reequilibrar, por eso el interés por aprender tiene que ver con buscar estructuras de conocimiento cada vez más complejas y estables.

Además de Piaget la autora se centra en otros autores para demostrar su teoría, y es que al final todos coinciden que el desarrollo es fruto de una compleja interacción entre el ambiente y el organismo y que uno de los factores ambientales que más interviene en su desarrollo es el propio cuerpo y su autoconocimiento.

El hecho de apoyar el pie descalzo en todo tipo de superficies, también irregulares, contribuye al desarrollo muscular. El calzado denominado preandante o el calzado para el gateo impide recibir sensaciones, además añade un peso excesivo a los pies impidiendo que se muevan libremente. Todo ello explica por qué los niños, cuando tienen un mayor control de su cuerpo, se quitan los zapatos continuamente.

/Con información de Bebés y más