Por burlarse de Maduro podrían sufrir 20 años de cárcel

20 septiembre, 2018

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El humor sobre la política tiene una larga tradición en Venezuela. Pero el último episodio ligado al tema parece indicar que los tiempos de la tolerancia están irremediablemente en el pasado.

El humor sobre la política tiene una larga tradición en Venezuela. Pero el último episodio ligado al tema parece indicar que los tiempos de la tolerancia están irremediablemente en el pasado. Dos efectivos del cuerpo de bomberos acaban de ser detenidos y acusados de incitación al odio por haber grabado un video en el que muestran a un burro llamado “Maduro”. Se enfrentan a una condena que podría enviarlos por 20 años a la cárcel.

Los dos efectivos del Cuerpo de Bomberos del Estado de Mérida fueron identificados como Ricardo Prieto Parra y Carlos Varón García. Merida se encuentra en la zona andina del país, que atraviesa una descomunal crisis económica con escasez de productos elementales, falta de dólares y empresas quebradas o en tránsito de desaparición.

En el video, los dos funcionarios dependientes de la Gobernación de Mérida simulan ser locutores de televisión y, en tal carácter, le dan la bienvenida al asno. Según la parodia, el animal acababa de ingresar a la estación de Apartaderos para someterla a una inspección. “El presidente está comprobando si hay buen pasto”, dice una de las voces cuando el animal se detiene a masticar un poco de hierba.

La broma no les duró mucho. Los dos bomberos fueron arrestados por funcionarios de la Dirección de Contrainteligencia Militar, uno de los brazos del Gobierno de Nicolás Maduro en el control del orden interno.

El video en el que se satiriza la imagen del presidente de Venezuela se ha hecho viral y ha sido objeto de numerosos comentarios.

El caso escaló incluso al más alto nivel del Estado. Este miércoles, durante una rueda de prensa convocada para los medios internacionales en el Palacio de Miraflores, el presidente Maduro se refirió al tema en cuestión, aunque de mala gana.

El encuentro con el periodismo tenía como tema los recientes acuerdos comerciales de Venezuela con China y las tensiones diplomáticas con Colombia y Estados Unidos. Cuando un periodista le preguntó al presidente su opinión sobre el destino de estos funcionarios sancionados, la pregunta irritó al líder chavista, quien se negó a responderla aduciendo que el asunto no tenía el nivel adecuado para una cita con la prensa internacional.

Prieto Parra y Varón García fueron acusados ante la justicia de “instigación al odio”, una figura que fue introducida en la llamada Ley Constitucional contra el Odio, promulgada el año pasado por la cuestionada y no reconocida Asamblea Constituyente que comenzó a sesionar en 2017. La norma contempla severas penas a aquellas personas que agredan verbalmente, intimiden, ofendan o insulten a funcionarios públicos.

Distintas ONGs como el Foro Penal Venezolano y el Observatorio de Derechos Humanos de la Universidad de los Andes cuestionaron la medida del Gobierno. “La proporcionalidad es esencial a la justicia”, dijo esta última entidad.

Con información del Diario Clarín.