Pacientes del Ineram padecen calor intenso por fallos en el suministro eléctrico
El Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias y del Ambiente (Ineram) Juan Max Boettner sufre cortes sucesivos de energía eléctrica, lo que obliga al hospital a trabajar con generadores durante varias horas. Según el Dr. Felipe González, director del Ineram, los cortes de energía causaron averías en un acondicionador de aire, lo que dejó a los pacientes padeciendo el intenso calor.
“El hospital tiene un área antigua que el próximo año cumplirá 80 años, y un área que se hizo durante la contingencia, una área nueva. Esa área nueva es la que se vio afectada por, aparentemente, una subida de la tensión y desconectó uno de los contactores que ingresa al pasillo que es el sector de contingencia”, explicó el médico.
Detalló que las dependencias afectadas incluyen los depósitos del Ministerio de Salud y del Programa Ampliado de Inmunizaciones que almacena vacunas. “Pasamos a depender de nuestros generadores eléctricos. Los generadores, lógicamente, aseguran de que los equipos biomédicos den la cobertura necesaria porque tenemos un área de cuidados intensivos en esa zona nueva, y lógicamente todo estuvo garantizado”, afirmó.
Sin embargo, los aires acondicionados industriales no están conectados a los generadores, lo que resultó en la falta de climatización durante el periodo de salida de la red. “Nos pusimos en contacto con el gerente de la ANDE, habíamos hablado con Gabriel Cuevas, que es el responsable, también con el gerente de la ANDE, nos dieron respuesta inmediata, pero no pudo sino hasta promedio a la media noche solucionarse el problema que dejó sin luz a toda esa zona”, añadió el doctor.
El resto del hospital no tuvo inconvenientes ya que dependía de otra red. El director mencionó que este tipo de problemas son frecuentes, especialmente en épocas de mucho calor, debido a la inestabilidad de la tensión de la ANDE en la zona.
“Salimos de línea frecuentemente y lo que ocurrió fue que al volver a entrar, lastimosamente detectamos que unos tres aires acondicionados estaban fuera de servicio, dos pudieron ser reparados, el tercero se quemó la turbina que es la que permite que el aire fluya hacia el interior del pabellón”, explicó.
González concluyó que los equipos son muy sensibles a las variaciones de tensión y que, aunque no debería ser normal, estos incidentes ocurren con frecuencia, afectando tanto a los equipos de climatización como a los biomédicos.