La Fiscalía imputó por hurto este martes a Aida Villalba, empleada del fallecido exfiscal Javier Ibarra. La mujer supuestamente llevó el arma de fuego que presuntamente se utilizó para acabar con la vida del exagente del Ministerio Público.

Villalba dio positivo a la prueba de antinomio en la mano derecha.

"Ella vino a trabajar y se encuentra con su patrón muerto. Aparentemente, al entrar en la pieza o al tocar cosas de la cosa, se contaminó su mano", dijo el abogado de la mujer, Avelino Britos.

"Mi defendida fue imputada por hurto especialmente grave, porque supuestamente hizo desaparecer el arma. No existe el porqué, a quién le beneficia, no tienen eso", añadió.

"El arma ya no estaba cuando ella entró. Niega categóricamente que haya tocado el arma y el cuerpo, solo tocó una sábana para cubrir el cuerpo a pedido de la policía", sentenció.