Liliana Urbieta, hija del desaparecido, manifestó su dolor y la esperanza de cerrar el duelo, tras recibir la información de que su padre habría fallecido el 16 de febrero de 2017, según los documentos encontrados por las autoridades.
Liliana destacó el trabajo conjunto del Ministerio Público, el Batallón de Inteligencia Militar, el Departamento Antisecuestro de la Policía y la Fuerza de Tarea Conjunta en la búsqueda de su padre. “Valoramos mucho todo el esfuerzo y la dedicación que el Ministerio Público está trabajando. Estas son instituciones que están involucradas en la búsqueda del paradero de mi papá", afirmó.
Explicó que los operativos se intensificaron a partir del 15 de febrero, con la detención de dos personas que colaboraron proporcionando información clave para encontrar la primera caleta.
La caleta contenía evidencias, como una agenda personal, que mencionaba la fecha en la que Félix Urbieta habría fallecido. “En esa agenda hay evidencias que para nosotros son cruciales para establecer el paradero de nuestro papá. En una parte escrita mencionó que mi papá ya falleció el 16 de febrero del 2017", explicó.
Sin embargo, aclaró que la agenda no especificaba el lugar exacto ni las circunstancias de la muerte.
Liliana detalló que el hallazgo del dato requirió un proceso de análisis por parte de las autoridades. “Días después, porque todas las evidencias encontradas tienen que ser analizadas, nos informaron ya de parte del Ministerio Público del Fiscal lo que estaba escrito en esa agenda”, comentó.
Aunque no tuvo acceso directo al contenido de la agenda, enfatizó que se trataba de un documento similar a un diario, donde se registraban los hechos.
La hija del ganadero expresó su sorpresa al saber que la muerte de su padre habría ocurrido tan poco tiempo después de su secuestro. “Lo que sí nos tomó de sorpresa es el corto tiempo de haberle secuestrado que haya fallecido. Eso sí nos tomó de sorpresa, porque, octubre, noviembre, diciembre, cinco meses, aproximadamente... ya papá ya falleció", declaró.
Finalmente, reafirmó el compromiso de su familia de continuar con la búsqueda hasta dar con el paradero de Félix Urbieta. “Duele mucho, duele, es uno de los inexplicables, pero no vamos a descansar hasta encontrarlo”, sentenció.