Almada afirmó que, a lo largo de estos años, ITTI observó un uso abusivo del software que no se alineaba con los términos originales del contrato, situación que llevó a la empresa a iniciar un proceso de mediación.
Almada explicó que, desde hace algunos años, ITTI detectó discrepancias entre el uso del software por parte del Banco Atlas y las estipulaciones contractuales. “Fuimos observando cómo hicieron uso de nuestro software a lo largo de este tiempo y desde hace un par de años les dijimos que no había una coincidencia entre el uso que ellos hacían y lo que el contrato que le dimos les habilitaba a hacer”, comentó.
Pese a las reiteradas invitaciones de ITTI para negociar una adecuación del contrato, Almada aseguró que el banco respondió con “evasivas o negativas”.
La situación escaló al punto de que ITTI emplazó al Banco Atlas a un procedimiento formal de mediación, que Almada describió como “la antesala a un contencioso”. Según el asesor jurídico, el proceso formal tampoco dio resultados satisfactorios. “En parte de mediación recibimos exactamente la misma respuesta, evasivas, negativas”, sostuvo.
ITTI fundamenta sus reclamos en dos puntos principales: primero, el banco habría realizado desarrollos sobre el software más allá de lo permitido por el contrato; y segundo, habría permitido que personas no autorizadas accedieran a los códigos fuente, violando normas de seguridad.
“Tenemos incumplimientos constatados de más de 37.000 líneas de código que se incrementaron respecto del software original, y tenemos también incumplimientos constatados de más de 30 personas sin credenciales que accedieron a nuestro software de una manera irregular”, afirmó Almada.
El asesor destacó que el conflicto es exclusivamente con el Banco Atlas y no afectará a los clientes de la entidad financiera. “En todo momento le hemos dicho al Banco Atlas que nuestras diferencias contractuales no van a poner en juego la integridad del sistema financiero, y que nuestra diferencia es con el Banco Atlas, no con sus clientes”, subrayó.
Almada señaló que ITTI confía en llegar a un acuerdo antes de que el caso escale a un arbitraje legal. No obstante, afirmó que, de ser necesario, un juez o tribunal determinará cuál de las partes tiene la razón. “Estamos muy confiados en que nuestra postura es la que responde a la realidad”, remarcó,