Giménez rechazó la afirmación de que Paraguay sea el más interesado en las negociaciones y destacó que ambos países compartían un interés igual en alcanzar acuerdos. “No sé qué somos los más interesados. Quizás no comparta esa afirmación. El gobierno de Santiago Peña cerró una tarifa histórica de 1928 que genera recursos importantes para los programas del gobierno”, declaró.
Explicó que la tarifa histórica se acordó por primera vez por tres años consecutivos, en una estrategia para prever posibles complicaciones en las negociaciones. “Optamos por darle previsibilidad y justamente sacar de la mesa una discusión activa que es la tarifa. Entonces, en ese sentido estamos bien, estamos seguros, estamos con recursos para los programas del gobierno”, indicó.
Según Giménez, el acuerdo actual brinda estabilidad financiera y permite concentrarse en otros aspectos del Anexo C.
El ministro advirtió que Brasil no tiene exclusividad en sus intereses con respecto al tratado y que ciertas especulaciones podrían confundir a la opinión pública. “Yo considero que los dos países tienen igual de interés de negociar el anexo C. No veo como un interés mayor por parte de Paraguay. Si no, confundiríamos a la opinión pública y entraríamos en el campo de las especulaciones”, sostuvo.
Asimismo, recordó que la tarifa actual se ajustará en 2027 al costo de producción de la energía, eliminada la deuda acumulada.
Mencionó que el Tratado original no incluía conceptos como los gastos sociales, pero subrayó que estos elementos fueron incorporados décadas después mediante acuerdos entre los países. “Cuando se firmó el tratado, no había el concepto de gastos sociales. Esto se incorporó décadas más tarde y fue un acuerdo entre los países, genial”, puntualizó.
El ministro destacó que la inclusión de nuevos elementos en el Anexo C sería crucial para definir el costo de producción, que podría variar entre 10 y 16 dólares.
Giménez señaló que Brasil enfrentaba tanto comodidades como incomodidades en el contexto de las negociaciones actuales. “Hoy, en la actualidad, esa situación, la situación que hay entre los países, le coloca a Brasil en ciertos aspectos tan cómodos y en otros no tan cómodos”, afirmó.
Destacó que el acuerdo operativo vigente beneficia a la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), al permitir el uso de energía más barata, lo que representa un aspecto importante para Paraguay.