Juan Martín Barba, abogado de la empresa constructora Rehobot, acusó al diputado Orlando Arévalo y a su esposa de una serie de irregularidades y abuso de poder con el fin de evadir un pago pendiente por la construcción de su mansión.

Barba señaló que Rehobot fue la empresa encargada de construir la casa del diputado Arévalo, la cual se exhibía en redes sociales por su majestuosidad y belleza. La empresa cobró cerca de dos mil millones de guaraníes por la construcción y quedó un saldo de cuatrocientos millones de guaraníes que el diputado debía abonar al finalizar la obra.

El abogado explicó que, al concluir la construcción, la empresa solicitó el pago del saldo pendiente, pero el diputado Arévalo, en lugar de cumplir con la deuda, optó por denunciar a la empresa en la fiscalía. "El señor Arévalo no encuentra nada mejor que denunciarlos en fiscalía, como él era presidente del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM) y vicepresidente posteriormente", manifestó Barba.

La denuncia fue realizada a través de la esposa del diputado, y aunque el fiscal de Lambaré consideró que se trataba de un caso civil, el diputado recusó a cinco fiscales hasta encontrar a la fiscal Sandra Ledesma en Luque, quien imputó a la constructora por daños y seguridad en la construcción. "La constructora deja de ser víctima para ser victimaria y empieza a ser apretada por el clan del señor Arévalo con el solo fin de no pagar su cuenta", afirmó Barba.

Según Barba, la remodelación tenía un costo aproximado de 2.400 millones de guaraníes, de los cuales se pagaron 2.000 millones en etapas. Sin embargo, la fiscal Ledesma imputó a todos los miembros de la constructora y solicitó prisión para los directivos de la empresa, a pesar de tratarse de una causa civil. "La fiscal pide prisión, imagínate, prisión, por una causa civil", exclamó el abogado.

El abogado también presentó copias de chats donde la esposa de Arévalo felicitaba a la constructora y expresaba su sorpresa por la belleza de la mansión. "Una vez que se le intima para el pago, ahí, mágicamente, la casa estaba llena de problemas", declaró.

Finalmente, Barba denunció que la fiscal Ledesma acusaba a sus clientes de peligro en la construcción y estafa, en un aparente intento de extorsión. "Mi cliente va a demostrar en esta denuncia que le están ofreciendo cambiar, no cobrar, que eso es una extorsión, por retirar la denuncia, o si no te meto presa".

Enfatizó que con Arévalo fuera de su cargo del JEM, podrán litigar en igualdad de condiciones. "Vamos a poder demostrar que esa casa se terminó y cómo se pagó, porque le denunciamos por lavado de dinero también", dijo, y mencionó que el diputado se negaba a que la empresa emita las facturas correspondientes por la obra.