Director del Pabellón Libertad habla sobre la reclusión de Hugo Javier González
Hugo Javier González, exgobernador del Departamento Central, fue enviado este martes al Pabellón Libertad de la Penitenciaría Nacional de Tacumbú tras ser condenado a diez años de cárcel por los hechos punibles de lesión de confianza y producción de documentos no auténticos. Ignacio Chamorro, director del Pabellón Libertad, habló sobre la rutina diaria y las normas de convivencia en el lugar.
Chamorro explicó que Hugo Javier primero pasó por una revisión médica y se le comentaron las normas de convivencia. "Toda persona que quiera ingresar primero debe estar condenada", afirmó. El Pabellón Libertad está habilitado para recibir hasta 500 internos y actualmente alberga a 460.
El director mencionó que el Pabellón Libertad es una comunidad cristiana donde se ofrece educación y capacitación laboral. "Todos deben levantarse a las 6:00 de la mañana porque a las 7:00 hay un control rutinario. Tienen que limpiar su celda, suelen convivir entre tres personas", detalló.
Hugo Javier y Miguel Robles, su entonces jefe de gabinete, estarán separados dentro del pabellón. El director también mencionó que tienen solo tres funcionarios para 460 internos, aunque su sector es el más tranquilo.
Además, explicó que la pregunta clave que hacen al interno es si quiere cambiar. "Se tiene que levantar más temprano que el resto de la población, tiene que limpiar el patio y otras cosas", afirmó. Chamorro mencionó que hay horarios donde los internos deben leer algo, ya sea la Biblia o algún libro. "Si la persona no actúa como queremos, se lo invita que vaya a otra parte", explicó.
Añadió que si el Estado está ausente, el reo saldrá peor. El director destacó que la sociedad no está preparada para acompañar a las personas que salen de la cárcel. "Lastimosamente nuestra sociedad no está preparada para acompañar a la gente que sale de la cárcel", afirmó. "Cuando le presentamos el plan a Hugo Javier, respondió que quiere ser parte del programa. Se puso a disposición", señaló.
Chamorro mencionó que Armando Javier Rotela no estuvo en el Pabellón Libertad, sino en el Pabellón D. "Rotela no se hacía pasar como que él mandaba en la cárcel. Pero sí, había un sistema que internamente funcionaba. En cada sector había un reo responsable. Nunca tuve problema con él ni tuve un contacto cercano", comentó.
El objetivo del Pabellón Libertad no es la seguridad, sino cambiar la vida de cada interno. El director compartió su experiencia personal, mencionando que estuvo preso por el caso María Cristina de Luque y que si la Iglesia no se hubiera involucrado, no estaría hablando con ellos.
"Todos los abusos criminales que hay en Paraguay, es por abuso del Estado. Uno tiene que tener una mirada macro y un objetivo claro. Se debe crear el ambiente para el reo para que pueda cambiar", finalizó.