En un contexto de creciente tensión en Medio Oriente, el analista político internacional Jorge Codas Thompson ofreció su visión sobre el reciente ataque de Irán a Israel, marcando un punto de inflexión en la política de disuasión que caracteriza a la región. Según Codas Thompson, “hay un antes y un después” que redefine la estrategia de seguridad de potencias como Israel y Estados Unidos.

El ataque iraní, aunque simbólico y sin causar daños significativos, representa una fisura en la imagen de invulnerabilidad que ambos países han proyectado históricamente. “Eso categóricamente falló con el ataque de Irán”, afirmó el analista, destacando la importancia de la reputación en la política internacional.

La respuesta a este ataque es un tema de debate entre los estrategas. John Bolton, ex consejero de seguridad nacional de los Estados Unidos, sugiere una reacción “no de manera proporcionada al ataque iraní, sino desproporcionada”, lo que podría escalar a una “conflagración regional”.

Por otro lado, tanto Irán como sus aliados han expresado su intención de dar por concluido el conflicto, siempre y cuando Israel no responda con más violencia.

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha indicado que Israel se tomará su tiempo para decidir cómo y cuándo responder, una declaración que Codas Thompson interpreta como una posible estrategia para disminuir la presión y permitir que la situación se diluya con el tiempo.

Finalmente, el analista considera que Irán ha reconocido las limitaciones de su arsenal frente a las avanzadas defensas aéreas de Israel, como el famoso “domo de hierro”. “No es tan fácil como ellos pensaban directamente atacar y causar un daño importante”, afirmó Codas Thompson.