El triunfo de Javier Milei en las elecciones presidenciales de Argentina ha generado expectativas y temores sobre el rumbo económico y político que tomará el país. El economista liberal, conocido por sus polémicas propuestas y su estilo confrontativo, tendrá que enfrentar una situación compleja y negociar con las demás fuerzas parlamentarias.

Para el analista político Amilcar Ferreira, Milei tendrá que moderar su discurso y sus acciones, ya que no cuenta con una mayoría propia en el Congreso. “No tiene los votos en el Congreso, va a tener que construir alianzas principalmente con el partido junto por el cambio de Mauricio Macri y Patricia Bullrich”, afirmó.

Según el experto, Milei deberá lidiar con la oposición del peronismo y que le dará “batallas en los cambios que va a plantear”. Ferreira considera que el nuevo presidente tendrá que hacer frente a una crisis fiscal, financiera y productiva que afecta a Argentina desde hace años.

“Argentina es un país que hoy ya no tiene acceso al crédito voluntario, no participa en los mercados internacionales de capitales, no tiene crédito en las inversiones, hace 10 años que no crece, las inversiones más bien se han ido en este último tramo importantes empresas que se han retirado de Argentina, justamente por la inestabilidad”, explicó.

Asimismo, señaló que Argentina es un país “donde prácticamente todo está subsidiado”, desde el transporte público hasta el transporte aéreo, lo que genera un déficit fiscal “insostenible”. “Tiene hoy un déficit fiscal en el orden del 5% del PIB al que se le suma el déficit fiscal que está generado por los intereses que paga el Banco Central por las letras de regulación monetaria,”, indicó.

Ferreira también se refirió a la campaña de miedo que se desplegó contra Milei, especialmente desde los sindicatos, que advirtieron que el pasaje del tren interurbano se multiplicaría por 22 si ganaba el liberal.

“Justamente una de las bases del peronismo son los sindicatos, y una de las campañas que se llevó adelante muy fuerte fue un volante que repartían los sindicatos ferroviarios, donde decían que si ganaba Milei, el pasaje del tren interurbano que sirve al Gran Buenos Aires, se iba a ir de 63 pesos a 1.100, prácticamente eso explica multiplicarlo por 22”, comentó.

Finalmente, destacó que Milei anunció en su discurso de victoria que no apostará por el gradualismo, sino por una política de shock. “Una de las cosas más resaltantes, en mi opinión, en su discurso ayer de reconocimiento de los resultados, fue de que el gradualismo no funciona, y por ende van a apostar por una política de shock”, dijo.